Esta receta que os traigo hoy es una de las clásicas en mi cocina, que no me canso de repetir porque sé que el éxito está asegurado y siempre que la hago desaparece en un abrir y cerrar de ojos.
En este caso, además estaba glaseada con mermelada casera de ciruelas, que le ha dado un toque buenísimo.
INGREDIENTES
- 150gr. de Aceite de girasol
- 150 gr. de Azúcar blanco
- 3 Huevos grandes
- 150 gr. de Harina de repostería
- 1 c/p de Levadura en polvo
- 2-3 Peras
- 2 c/s Mermelada de Ciruelas
ELABORACIÓN
Precalentamos el horno a 180º C y cubrimos un molde redondo con papel de hornear.
En un bol,batimos los 3 huevos con el azúcar hasta que doblen su volumen, incorporamos el aceite de girasol, tamizamos la harina con la levadura y la incorporamos poco a poco a la mezcla anterior.
Vertemos la mezcla en el molde redondo, y pelamos las peras, descorazonamos y cortamos en gajos. He puesto 2 ó 3 peras , porque depende del tamaño de éstas.
Colocamos los gajos de pera encima de la masa, cubriendo toda la superficie del molde y horneamos a 180º C durante 30-40 minutos, hasta que las peras estén ligeramente doradas y el bizcocho esté listo.
Para evitar que las peras se oxiden, al sacar la tarta del horno la bañamos con un almíbar espeso que haremos calentando las 2 cucharadas soperas de mermelada de ciruelas con 2 cucharadas de agua.
Con una brocha de silicona, pincelamos la superficie del bizcocho con este almíbar y dejamos enfriar antes de desmoldar.
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¿ A qué os apetece un trocito para merendar? Pues, ánimo que es fácil.
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